Las Redes Sociales Causan Divorcio


Efectivamente, juzgo que quien toma la decisión de divorciarse, es porque en realidad tiene motivos para ello, ¿correcto?… En todo caso, los motivos que llevan a ello puede llegar a variar de persona para persona y, seguramente, puede mudar conforme el tipo de relación que existe entre la pareja.

Empero, un simple coloquio que llega a ser mantenido con alguien en la plataforma de Facebook, puede que sea apenas una escueta conversación, pero también puede que sea el estopín que faltaba para que el relacionamiento de la pareja ruede pendiente abajo como bola de nieve.

Generalmente, pienso que nuestros actos son el resultado de creencias firmes que a lo largo de nuestras vidas nos han marcado un camino y una manera de ser. Por consiguiente, el mayor o menor éxito que hayamos obtenido en la implementación de soluciones a los problemas y dificultades que aparecen en la vida, a veces nos va formando un pedestal al que de vez en cuando llegamos con cierto orgullo fanfarrón de “sabelotodo” e “infalibles”.

Pero como uno no ha nacido ayer, sabe que en la abrumadora mayoría de los casos nadie usa el término “constructivo” para ninguna otra cosa que no sea “destruir”, y es así que un reciente estudio que ha sido realizado por la “Academia Americana de Abogados Matrimoniales”, llega a apuntar que el 20% de los casos de divorcios tienen ligación con la plataforma Facebook. Y el más común de los casos que ocurren, es que las fotos y el histórico existente en el chat de la rede llegan a ser citados como pruebas de traiciones por las ex palomitas.

Claro que querer cerrarse a las opiniones de los otros es una necedad ampliamente demostrada, pero además, lo que dicha investigación demuestra, es que las mencionadas conversaciones acontecen, generalmente, con aquellos amores pretéritos o con ex-enamorados de la juventud… Ni tan lejana como parece.

En todo caso, ¿sabe de aquella persona que aparece de la nada y lo adiciona en la red, apenas para querer recordar los buenos tiempos? Pues bien, el problema radica en que hay gente que se pone a recordar demás lo que ya pasó…

Y eso de las redes sociales pasar a ser el bode expiatorio para el fin de relacionamientos es algo que tiende a crecer, y el 80% de los abogados americanos acreditan en ello. Pero el villano no es solamente el Facebook. El MySpace (¿quién aún lo usa?) y el Twitter (¿rapiditas de 140 caracteres?) también han sido pruebas cabales de infidelidad usadas en los tribunales.

Por tanto, mis amigos, cuidado con las conversaciones que usted anda teniendo. Lo que para usted puede parecer una bobada, puede que no lo sea para su pareja…

Claro, después que sucede el divorcio, aparecerán aquellos que buscaran consolarte diciéndote: ¡Dios sabe por qué hace las cosas!… o hasta con un: ¡Vas a ver que de ésta salís enriquecido por la experiencia! En todo caso, ya que la cosa se puso fea, pienso que debería haber un atenuante en el código penal que proteja a los que, en un ataque de nervios ante tales estupideces, intenten estrangular a los alarmistas y a los oportunista chupamedias… ¿No sería óptimo?

(*) Si quiere continuar a entretenerse con otras lecturas amenas, mi adicto leyente, tiene varios de mis libros impresos o en versión e-book, disponibles en el sitio web: www.clubedeautores.com.br/carlosdelfante